7 de febrero de 2009

Las cosas que uno encuentra


Fontanar a 17 de Abril de 1943

Querida Loli:
No trates de alevosía e incomprensión el que me dirija a ti con estas líneas. Todo lo disculpa la adoración que por ti siento. He podido comprobar las muchas y buenas cualidades que atesora tu alma y por eso he comprendido que te amo, pero con un amor puro y sencillo, un amor que sólo termina con la existencia del ser que lo experimenta. Créeme, adorada Loli, y disculpa que te trate tan familiarmente. Son tan perfectas esas cualidades que si yo recibiera una mala respuesta sería la desgracia de toda mi vida.
Espero que me contestes. Tuyo siempre,
Vicente.

6 comentarios:

Insumisa dijo...

:-D
Linda pareja. La Guardiana y tu papá. Muy guapos y jóvenes.

Te abrazo

Lan dijo...

Ella 18 y el 17, lo sé por la fecha de la carta que fue la primera que él la escribió. ¡Qué feliz debía parecerles la vida!

Flor y Nata dijo...

!!Qué bello!!! cualquiera querría detenerse en un momento así...y cualquiera, igualmente, ser protgonista de semenjante misiva.
Bss

LM dijo...

que lindas palavras!
beijos

Paz Zeltia dijo...

ella sí parece jovencita, pero él solo 17, estrenando hombría y ya con ese porte! (y ahora, mecachis,c on esos pantalones de "tiro largo" con el culo por las rodillas que cuando los ves de lejos parecen pingüinos caminando sin orden! jajaja, ay que mayor voy!

oye, pues tú te das un aire a su manera de escribir :) y tambie´n en las facciones.

preciosa pareja, yo también los miro y resulta raro mirarles cuando ya su futuro es pasado

Lan dijo...

Bueno, Flor y Nata, el estilo de la misiva es un poco relamido pero investigando me enteré que esa carta no la hizo el sólo, sino que contó con la inestimable ayuda de un amigo y de un tío. Pero las cosas resultaron como decía la carta.
Gracias por tu amable comentario, LM.
La gente, Zeltia, era muy envarada en esa época y predominaba lo que llamaban formalidad, así que también en el vestir se manisfestaba, dando edad a quien sólo tenía estatura.
Gracias por decir que me parezco a mi padre pero él era un hombre guapo y yo soy del montón.
Sí, resulta nostálgico ver al cabo de los años en lo que queda todo, hasta la felicidad.