No tenía explicación. ¿Cómo aquella finísima belleza acabó con aquel hombre tan sumamente feo?
- Pues porque él la pretendía una y mil veces y ella siempre que no y no. Que no había manera, aquel hombre no le gustaba nada.
- Pues eso mismo pienso yo pero, ¿cómo consiguió que le aceptara?
- Pues porque al fin, un día, se ve que la pilló algo ansioseta y, como él estaba siempre encimaza, pues catapún.
- ¿Cómo?
- Pues porque las mujeres, hijo, no lo olvides, tienen también sus momentos erráticos y volubles.
- Si usted lo dice, tío Damián.
- Pues porque él la pretendía una y mil veces y ella siempre que no y no. Que no había manera, aquel hombre no le gustaba nada.
- Pues eso mismo pienso yo pero, ¿cómo consiguió que le aceptara?
- Pues porque al fin, un día, se ve que la pilló algo ansioseta y, como él estaba siempre encimaza, pues catapún.
- ¿Cómo?
- Pues porque las mujeres, hijo, no lo olvides, tienen también sus momentos erráticos y volubles.
- Si usted lo dice, tío Damián.
6 comentarios:
!El arte de insistir!!!...tiene su gracia !!!...lo peor es que los errores que se cometen en su nombre tienen, la mayoría de las veces, un precio muy alto. Pero debe ser frecuente o al menos antes lo era, que insistiendo se consiguiese lo que se pretendía. Al menos eso dice el refrán.
Bss
oh sí, "el que la sigue, la consigue" éso me dijo mi ex cuando yo le decía que antes virgen para los restos.
Y ya ves.
Se ve que me pilló un poco ansioseta un dia.
(aunqeu creo que también requiere mucha `paciencia y arte del saber amar)
A mi sí. Me pescaron bien "ansioseta" y ¿qué crees?
¡¡¡ME ENCANTÓ!!! No es que sea una finísima belleza. De hecho soy mas común que el común de los mortales, pero casi nada o NADA teníamos en común él y yo. Y mira, 25 años después y sigo "ansiosetona"
jajajajaja
:-))
Sí, Flor y Nata, y no sé si conocerás este otro refrán: "Perro que mucho lame sangre saca".
Eso, Zeltia, de virgen para los restos suena a muy antiguo. Menos mal que también las vírgenes se ponen ansiosetas de vez en cuando. ;-)
Lo tuyo, Piel de Letras, va de ansioseta vocacional. ¡Qué entrega!
Besos.
pues era yo virgencita, como la del perpetuo socorro, aquél dia que me pilló ansioseta. Y casi casi me temo que él tambien jajaja
Te creo.
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