19 de diciembre de 2008

La Navidad es para los niños

Con la Navidad, un recuerdo le vino de su infancia. Se escondió con su primo tras el sofá de la enorme cocina donde su tío, edil tradicionalista, montaba cada año un gran belén. De algún sitio sacaron aquella carabina de aire comprimido. Cuando todos se fueron y sólo las luces del belén lucían, como francotiradores emboscados, dispararon alternativamente contra magos, portal, pastorcillos, romanos, angelitos, burros, camellos... y, con especial saña, contra esas bolas esféricas que colgaban encima. Entre angelitos desalados, burros cojos, pastores sin cabeza, romanos mutilados y bolitas colgando del muñón… Comprendió que la maldita Navidad le repugnaba.

No hay comentarios: